El pesebre navideño y elementos decorativos

El niño Jesús, sus padres José y María, el ángel y la estrella de Belén dentro de un establo, acompañados de tres reyes que decían ser magos y rodeados de los pastorcitos, un buey, una oveja, un gallo y una mula. Así está representado el pesebre navideño, según la liturgia en muchas partes del mundo, especialmente en la tradición católica.
Para algunas personas, rememorar el nacimiento de Jesús es renacer como personas espirituales, para otros no tiene mayor significado.
Con el tiempo, el pesebre fue adoptando formas y figuras de las regiones y según sus costumbres.
En la zona andina, por ejemplo, utilizan como decorativo a sus animales, ya sean vacas, llamas, ovejas, cabras, incluso la propia vegetación. En otros países, principalmente en el medio oriente, se observan camellos.
En los pesebres de las familias citadinas se pueden ver animales domésticos, autos, papanoeles y adornos según sus costumbres, hasta el estilo por decorar.
El árbol navideño, la guirnalda, luces de colores, flores, piñas y esferas multicolores son elementos que surgen de distintas leyendas asociadas a la Navidad; de cualquier manera no faltan en las casas, hay quienes prefieren árboles de pino fresco, otros artificiales para reusarlo todos los años.
Los centros comerciales ofrecen adornos de distintas formas, tamaños colores, tanto para el nacimiento como para el hogar. Pesebres grandes, pequeños, hasta de personajes de cera, los famosos niños cusqueños, de madera y también de porcelana.