“¡Me siento otra”, declara Patricia, quien no puede dejar de mirarse en el espejo. Por fin decidió cortar su largo cabello y, por vez primera, aceptó un tinte que le da un tono castaño claro. “No me animaba a perder mi cabello que he mantenido largo desde que era niña. Tenía miedo, pero al final lo hice y me siento contenta por ello”. Su hermana Nancy (18) la animó. “Decía que aparentaba ser una virgen de pueblo, absolutamente predecible por no decir aburrida”. Así que se puso en manos de un estilista y “no me arrepiento”.
De hecho, esta mujer, auditora de profesión, dice que inclusive está dispuesta a cambiar su vestuario. “No dejaba el pantalón por nada, siempre de color café, adul o negro; pero me he sorprendido mirando, en estos días, faldas y vestidos. Algo ha cambiado dentro de mí. Fue animarme, nada más”.
Cambiar, proponerse nuevas metas, es algo imprescindible en la vida de las personas. Ayuda a elevar la autoestima, dice la psicóloga Susana Sáenz. “De hecho, un cambio asumido con entereza siempre va a ser positivo, porque estimulan, representan que se está buscando algo mejor: verse más linda (o lindo), arriesgarse”. Es una actitud “que le lleva a pensar que le irá mejor en el amor, en el trabajo... es sentirse capaz de hacer cosas nuevas”.
Tatiana Jáuregui, también psicóloga, hace notar que estamos no sólo a días de cambiar de año, sino de década. Con el 2011 se da pie a una nueva etapa, momento ideal para impulsarse y superar aspectos que hacen que las personas no se sientan conformes ni satisfechas consigo mismas. “Se dan casos de gente que sienten que no merecen la aprobación o aceptación de otra. Si una se pregunta el porqué, podrá darse cuenta de los porqués. “Si se toma conciencia de las causas y se quiere cambiar, un buen momento es éste. “Todas las personas merecen darse una oportunidad, es un volver a nacer y es muy importante tener claro eso”, explica.
Sáenz señala que los cambios dependen de cada uno y se debe tomar en cuenta no sólo la apariencia física, también aspectos espirituales, familiares, laborales, educativos, de salud, de amistades, de entretenimiento y, por supuesto, financieros. “La pregunta es: ¿No he logrado conseguir un cambio positivo hasta ahora? Si la respuesta es: ‘No he hecho esto por miedo a qué pasará’, pues es el momento de decirme: ‘Este año que se inicia me armo de valor y lo haré’”.
Algunos consejos para cambiar
1. AUTOEVALUACIÓN. Antes que nada, cada persona debe hacer una evaluación tanto interior como de su comportamiento exterior con su entorno; eso significa “hacerse una introspección, echar una mirada hacia adentro para saber qué cosas de su personalidad desea cambiar”, dice Sáenz. Se debe ser honesto en el buen sentido y no criticarse ni lastimarse con palabras como “fui una inútil”, “no sirvo para nada”.
2. METAS. Jáuregui sugiere plantearse nuevas metas. Todo comienza con una misión, visión o sueño personal. A partir de esto, uno debe ir estableciendo metas de corto, mediano y largo plazo, todas encaminadas hacia esa misión personal.
3. VALORES. El sueño de cada persona debe estar orientado por sus valores, al igual que todas las metas que se plantea. Una meta conseguida por medios que vayan contra los principios sólo dejarán más vacío que antes.
4. ACTITUD. El portal www.enbuenasmanos.com señala que una buena actitud positiva hace posible que uno sea exitoso. Le da la energía para que pueda seguir su propósito, haga crecer su potencial y siembre semillas que beneficien a otros. Pero también hace que el viaje sea más agradable en el camino sin importar a dónde le lleve. Ser positivo es una actitud que marca diferencia.
5. RECUENTO. Jáuregui también aconseja que cada cierto tiempo o año debe realizarse una evaluación de las metas cumplidas, y, si es el caso, la razón por las que no se pudieron alcanzar. “Podemos cometer errores, pero debemos comenzar a hacer otra cosa con el convencimiento de que ‘no voy a cometer las mismas fallas’; se debe pasar la mala etapa y seguir”, dice Jáuregui.
6. CREER EN UNA MISMA. La primera característica de una persona con una buena actitud es que piensa positivamente en su valor personal. Es el punto de partida para que los demás se rindan a sus pies.
APUNTES
• Cuándo cambiar. Es importante que los cambios propuestos sean cumplidos en determinado tiempo, lo que vale para los más sencillos como cambiar de look, hasta animarse a viajar a otras tierras o abrir un negocio. Por supuesto que esto debe ser planificado con más tiempo. No existe un cuando; sin embargo, asociar el cambio con el Año Nuevo puede ser un avance.
• Pedir consejos. La psicóloga Susana Sáenz dice que es importante pedir consejos a terceras personas, principalmente a aquellas en las que una sabe que despierta aprecio genuino. Plantear las ideas propias, escuchar la devolución puede ayudar a ganar seguridad respecto de lo nuevo que se quiere emprender. Lo que no significa depender de los demás para tomar decisiones.
• Romper la rutina. De lunes a viernes, e inclusive en fin de semana, hay personas que siguen una misma rutina. Para sentir que se vive plenamente, aun con las responsabilidades del trabajo y del hogar, hay que inventarse día a día y en pequeños detalles: elegir una ruta distinta para llegar a casa, visitar un mercado nuevo, cambiar de lugar los muebles de la casa, conocer nueva gente, etc.
Tips de belleza
Tonos verdes de ojos para recibir el 2011
Verde claro y verde blanquecino son dos tipos de sombras que puedes utilizar para este 31. Primero píntate con la sombra verde claro en la zona del lagrimal. A continuación difumina la sombra verde blanquecino más allá de la línea de las pestañas. Para darle el toque especial, sobre estas sombras puedes colocarte brillo blanco o plateado. Esto te dará ese aspecto brillante ideal para cualquier fiesta.
Otros tonos para maquillar los ojos
¿Qué tal maquillarte utilizando tonos azulados y violeta para el 31? Te proponemos que cambies de look y optes por este consejo. Empieza utilizando los colores azul y celeste en la parte externa de los ojos y el violeta al medio del párpado superior. No olvides delinear con color negro y resaltar tus ojos con rímel o pestañas postizas acordes a tu rostro. Ambos colores también puedes colocarlos en tus párpados inferiores.
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