La fiesta de Reyes tiene diversas connotaciones

La celebración de los Reyes Magos tiene diferentes manifestaciones en Bolivia, en los sectores urbanos. La festividad se remite a llevar al Niño Jesús a la iglesia para su bendición, pero en otras partes del mundo se expresa como el día de los regalos. Un antropólogo y un sacerdote divergen sobre si esta fiesta o la Navidad es más importante en el país.

Para el antropólogo Carlos Osterman, el sector urbano de la sociedad boliviana da más importancia a la Nochebuena que a la celebración de Reyes. “La Iglesia Católica, en el sincretismo religioso, optó más por la Navidad, por su componente divino, de ir más por el renacer a la vida que por la visita de los reyes que se sintetiza llevando al Niño a la iglesia para su bendición”.

Por su parte, el sacerdote Hugo Trujillo contrasta con lo anterior y señala que las dos celebraciones tienen la misma importancia en el país debido a que la fiesta inicia en Navidad y termina en Reyes, pero cada cual con su propio matiz. “Incluso me atrevería a decir que Reyes tiene más fuerza religiosa porque son los pequeños los que traen a la iglesia las imágenes del Niño Jesús para su bendición y en Navidad están más preocupados por los regalos y la comida”.

En cuanto a lo que ocurre en países donde la celebración de Reyes es más fuerte aun que la Navidad, Osterman atribuye ello a dos sensibilidades culturales existentes. “En una parte de Europa la Iglesia ha recogido elementos foráneos por la existencia de otras religiones que impusieron o reconocieron el nacimiento del Niño Jesús, a lo que la Iglesia Católica optó también a darle realce a la visita de los reyes”. Para Trujillo, la explicación de esto es más simple. “Lo que sucede en Europa es que la gente le da más importancia a Reyes porque es el día en que se entregan los regalos, y no así en la Navidad como ocurre en el país”.

Acerca de la posibilidad de que estas celebraciones experimenten alguna alteración en el país, Osterman anuncia que nada cambiará por el momento. “Ambas fiestas permanecerán tal cual están, la Navidad seguirá siendo el nacimiento y Reyes será vestirlo al Niño y bendecirlo”. Trujillo afirma, por su lado, que si bien estas celebraciones se mantendrán en el tiempo, podrían ir mejorando para el mundo católico.

“Esta religiosidad se mantendrá, es nuestro pueblo, pero está en la manos de nosotros los sacerdotes para que cada vez tengan más fuerza”.