La próxima noche del 24 de diciembre del año en curso, las Basílicas, Iglesias y Hogares, se vestirán de gala en la evocación de la Fiesta de Navidad; rememorando el Nacimiento del Niño Jesús: nacido en Belén Tierra de Judá, en un humilde establo que acogió a sus padres María la tierna y dulce doncella y José el humilde carpintero. Coros celestiales entonados por Ángeles proclamaron la Buena Nueva, e invitaron para ir a adorarlo no poderosos de la Tierra, sino a humildes pastorcitos, quienes guiados por una luminosa Estrella de Plata llegaron al Portal de Belén; allá estaba el Niño Jesús recostado en un humilde pesebre, el Mesías tan esperado durante siglos que dejando la grandeza de su Gloria, tomaba apariencia humana para ayudar a la Humanidad doliente.
El establo de Belén colmado de luces y resplandores divinos, era como una bella Postal Navideña, donde el Niño Jesús cubierto de sencillos pañales, rodeado de sus padres y calentado con el aliento de tranquilos animales de establo, sonreía a los pastorcitos, ellos adivinaron que bajo tan humildes apariencias, estaba el Hijo de Dios el Rey de Reyes y gozosos de ser tan privilegiados estos representantes de la inocencia, abandonaron el recinto proclamando las maravillas que habían visto. Con el transcurrir del tiempo, la Fiesta de Navidad se ha transformado en el acontecimiento religioso más importante del mundo y es celebrado bajo diversas costumbres de las diversas regiones, pero manteniendo siempre el espíritu religioso que tiene en la presente Navidad, al formular votos de Felicidad y Ventura para todos los hogares bolivianos, Ejecutivos, Empresas Periodísticas como EL DIARIO, que difunden la magnificencia de esta celebración; Lectoras y Lectores de la Revista Femenina; formulo votos porque el Espíritu Navideño esté siempre en vigencia y que en sus corazones nazca siempre renovado el Niño Jesús.
Para Familiares y Amistades, toda ventura y felicidad, que el Niño Dios nos depare fortaleza y valor para superar la ausencia mater de nuestros Seres Queridos. ¡Feliz y Cristiana Navidad!
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