lunes, 31 de octubre de 2011

Fotochocolate, nueva técnica para ampliar las ventas

Carmen Arené jamás imaginó que su preferencia por los chocolates la alejaría de su profesión y le daría un nuevo rumbo a su vida. “Cuando obtuve mi título de abogada instalé mi estudio jurídico en mi casa, pero siempre me encantó el chocolate y por eso aprendí a elaborarlo”, recuerda.

Hace cinco años, su cocina se convirtió en su fábrica y su sala en un salón de eventos para niños. Todo acorde con la nueva ocupación que hoy ejerce junto a su tía e hija: la elaboración de chocolates artesanales en su empresa Luly Luz. “Me capacité en el instituto Arpo Ltda (de formación técnica) y con artesanos chocolateros de Argentina y Perú”, explica.

Luego de dos años, la empresaria se dio cuenta de que la clave para crecer era implementar técnicas novedosas. Así, se unió al equipo Carolina Espinoza. Su socia que provee de los insumos y cuenta con la impresora EPSON T20, donde se imprime con tintas vegetales (comestibles) las hojas que usan para hacer las fotochocolates. La inversión inicial fue de 2.000 bolivianos.

INSUMOS. Arené dice que comenzó a trabajar con chocolates El Ceibo, pero que al resultarle muy costoso (Bs 40 por 1/2 kilo), se decidió por la marca Harald de Brasil, que cuesta Bs 45 el kilo.

Luego de pruebas con ingredientes que provenían de EEUU y Perú, actualmente compran el papel y las tintas vegetales a través de internet, desde Alemania. “El papel nos cuesta Bs 100 cada hoja y un litro de las tintas vegetales $us 150, incluido el transporte”, detalla Espinoza.

Agrega que si compraran los ingredientes en mayor cantidad se reducirían los costos, pero que al ser comestibles no se pueden guardar por mucho tiempo.

Arené resume las técnicas que utiliza en tres pasos: el inicial, que incluye bombones y paletas sin pintura; el medio, que corresponde a trufas y chocotejas (más elaboradas por el relleno que contienen); y el artístico, en el que están los cuadros y las fotografías que toman forma y color.

Los productos se promocionan a través de ferias y los cursos que imparte la especialista. “100 bombones cuestan Bs 350 y el portarretrato más grande, Bs 50”. En época de mayor demanda (mayo y septiembre) emplean tres personas más. “Ganamos entre Bs 2.000 y Bs 4.000 al mes”.

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