Más de 1.000 indígenas y campesinos, creadores del oriente boliviano abren desde hoy la 27.a versión artesanal denominada Artecampo que ofrecerá a la ciudadanía productos artesanales hechos de madera, de cuero, de cerámica, con material textil y pintado.
Como todos los años el lugar de la exhibición es la Tapera, situada en la calle Monseñor Salvatierra, al lado de la Mansión. La exposición durará hasta el 31 de diciembre. El acto de apertura es a las 19:30.
Angelitos de chala, nacimientos elaborados con palma zunka (parecida a la palmera de coco), que solo se produce en el valle cruceño; bordados con la técnica de remiendos, tejidos con colores vistosos, espejos pintados, juegos de cubrecamas y máscaras de madera son algunas de las novedades que trae esta versión.
Artecampo es una cooperativa que aglutina las etnias de los guaraníes isoceños, guarayos, chiquitanos, wenayecks, ayoreode y las comunidades mestizas de Vallegrande, Ichilo, Cotoca y Tajibos.
Patricia Saucedo, responsable del área comercial y ventas de Artecampo, explicó que esta cooperativa trabaja estrechamente con el Centro de Investigación, Diseño Artesanal y Comercialización Cooperativa (Cidac). “Cidac capacita a los expositores para que mejoren sus productos y les permite generar fuentes de ingresos para el hogar”, apuntó Saucedo. Por su parte, Mercedes Peña, presidenta de Artecampo y representante de la Asociación de Tajibos, no ocultó su entusiasmo, pues sabe que esta actividad ofrece una vitrina de oportunidades para comercializar sus productos.
“Muchos gustan del trabajo que hacemos, hay extranjeros que se quedan asombrados con nuestras obras. Lo interesante es que cada año mostramos novedades, pues Artecampo nos permite mejorar nuestras técnicas”, acotó.
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