La Navidad es la festividad más anhelada, la más universal y, desde cualquier punto de vista, la más importante del año. La rememoración del nacimiento de Jesús es una acción fundamental del cristianismo donde Dios se hace hombre para redimir a la humanidad. Así, monseñor Estanislao Dowlaszewicz, pidió a los bolivianos retomar la esencia de la Navidad, que es el nacimiento del niño Jesús, dejando de lado aspectos materiales.
Millones de personas en el mundo se alistan para recibir la Navidad de acuerdo a sus propias tradiciones, pero con el común de una celebración marcada por mensajes de paz, amor, solidaridad y afecto. Aunque con ingredientes comunes, cada país tiene sus tradiciones.
En Alemania, los niños dejan sus cartas en las ventanas y están dirigidas a Christkind, ángel mensajero del Niño Jesús que distribuye regalos. Los alemanes son famosos por hacer encantadoras casas de jengibre.
En Italia, antes de la Nochebuena se observa un estricto ayuno de 24 horas, seguido de una abundante cena rematada por un "panettone". El 6 de enero, una bruja amistosa deja regalos para los niños buenos y carbón para los malos.
En Rusia celebra el 24 de diciembre la Navidad Católica, y el 6 de enero la Navidad Ortodoxa.
En Reino Unido, en navidades no falta el muérdago en los hogares, pues esta planta usada por los druidas celtas les protege contra los demonios y malos deseos y trae suerte a sus hogares pues posee propiedades mágicas.
En Australia la Navidad llega en pleno verano, cuando más calor hace. Después de intercambiarse regalos en el desayuno del 25 de diciembre hacen la comida de Navidad en la playa.
Por otro lado, más que la Navidad, lo que realmente celebran los japoneses es la preparación para el nuevo año. Al empezar diciembre, se dedican a limpiar todo, casas, cuentas e, incluso, a renovar el vestuario, como símbolo de la entrada del nuevo año. El gran día final del año se denomina Omisoka. Este día degustan las tradicionales tazas de fideos, símbolo de longevidad.
Los finlandeses son muy cercanos a Santa Claus, ya que creen que vive en la zona norte del país, en Korvatunturi. Es por esa razón que muchas cartas dirigidas a Papá Noél son enviadas a este país. Hay un parque temático, que es una gran atracción turística, llamado Tierra de Navidad, donde se puede ver el hogar de Santa Claus. La Navidad en Finlandia no se limita a la Nochebuena y los dos días siguientes, está precedida por un periodo de preparativos.
México, cuna de los mayas y aztecas, empieza sus fiestas navideñas a mediados de diciembre con las Posadas, esto es, las caminatas de mariachis por las calles, tocando de puerta en puerta, pidiendo posada. Hay piñatas que representan el pecado y por eso las golpean con un palo hasta romperlas, demostrando así que vencieron al mal, siendo premiados con dulces que caen de ella.
En Bolivia, el 24 los niños duermen para esperar la Nochebuena al lado de sus padres. A la medianoche se festeja con un brindis, deseando la paz de todos. Luego del brindis se sirve un plato llamado picana, que es una especie de caldo casi picante con algo de dulce, con choclo, pedazos de carne de res y pollo, zanahoria, tomate, cebolla, papas, vino seco y demás ingredientes para una buena sopa. Una vez acabada la cena, todos abren sus regalos de Navidad. Abiertos los regalos, cada uno procede a mencionar sus buenos propósitos para contribuir a la unión y la paz de su hogar. En la ciudad de Sucre, tras asistir a la Misa de Gallo, en casa todos bailan villancicos al pie de los nacimientos para alegrar al Niño hasta el amanecer. Los villancicos son interpretados con instrumentos tradicionales.
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