martes, 5 de enero de 2016

Sea original: lleve arreglos de La Tienda de Cactus

“Sé diferente: regala un cactus”, es el lema que figura en la tarjeta de presentación de la tienda, y muchos parecen estar de acuerdo. Un ejemplo: la mañana que Los Tiempos había concertado la entrevista con los esposos propietarios, David y Shirley, un cliente pidió cien macetitas chiquitas de cactus enanos para obsequiarlos como recuerdos a los invitados de un matrimonio que tendría lugar al día siguiente. David tuvo que salir, de inmediato, a buscar cien pequeños ejemplares a un vivero en Quillacollo y ponerse a trabajar en la decoración.

David Mejía y Shirley Tapia son esposos, profesionales de la odontología y las prótesis dentales y apasionados por los cactus.

Esta pasión, que combinan con su principal oficio, acaba de motivarlos a iniciar un emprendimiento: una tienda de adornos, arreglos y recuerdos elaboradas con estos plantines espinosos y simpáticos.

Por supuesto, en el arreglo, los cactus tienen que estar vivos. A diferencia de arreglos florales con vida limitada, el objetivo es cuidarlos en casa, sobre un escritorio, una repisa o incrustados en la pared, a modo de cuadro, y para ello, hay que construirle un hábitat que también sea un paisaje digno de verse, con sus piedritas de colores, luces y otros.

Según relata Shirley Tapia, la familia cuenta con varios ejemplares en la huerta de la casa y hace un tiempo quiso aprovechar algunos plantines para hacer un adorno propio para el recibidor y para ello tomaron como referencias informaciones de miniterrarios en Internet.

Con un poco de paciencia y creatividad, el primer trabajo les quedó perfecto, al punto de que una amiga de la familia quedó “enamorada” del arreglo y terminaron regalándoselo. Después, otro amigo les pidió que le armen un terrario similar para él.

Y luego un tercero. Al final, les plantearon el desafío, por qué no abrir una tienda de arreglos con estos plantines, y nació “La tienda del cactus” en la esquina de las calles Pacciri y 16 de Julio.

Allí los esposos ponen en oferta de los clientes arreglos con todo tipo de cactus, con una demanda que sobrepasó sus propias capacidades de oferta. Los plantines que tenían en casa ya no abastecían y tuvieron que hacer contratos con un vivero en Quillacollo.

De allí se proveen todas las especies, pues existen más de cien variedades. Entre las más demandadas por el público están las suculentas, el zapallito, colmenas, ferocactus, asientos de suegra, cola de mono y cascabel, cresta de gallo, ulalas, abuelos, rosas verdes, arrepolladas, magníficos, globos, bonetes de cura y otros. Cada cliente tiene su demanda. Algunos incluso piden su terrario con especies seleccionadas, pues no sólo aprecian su valor estético, sino también las presuntas propiedades energizantes de los cactus.

Además, hay que buscar los contenedores, que son cristales de procedencia mexicana, pues los nacionales no tienen la misma resistencia ni transparencia. También hay que buscar la arena que se mezcle con la tierra ideal para que el cactus pueda desarrollarse con su lento crecimiento natural. Finalmente, están las piedras de colores que les consiguen caseras de La Cancha, que también las traen de diferentes canteras de Cochabamba. Pintar las piedritas tampoco es buena idea, ya que después con el agua para regarlos irán despintándose. Así, con un poco de paciencia, creatividad y cuidados, la Tienda del cactus espera a sus clientes con varias alternativas de arreglos, un recuerdo distinto.

CUIDADOS

• Una de las típicas preguntas de los clientes o de los destinatarios del regalo del cactus es cómo lo cuido ahora.

• Según explica Shirley Tapia, los cactus no necesitan mucho cuidado, es suficiente con regarlos cada tres semanas una dosis de cinco mililitros. Los cactus son fuertes y su crecimiento es lento.

• De allí que la desventaja es más bien para quien desea comercializarlos, pues debe esperar bastante tiempo para contar con buenos ejemplares para los adornos. “Este pequeño cactus tiene 10 años”, dice la propietaria mostrando un pequeño ejemplar de no más de 10 centímetros de altura.

• Por ello, es que la tienda ahora estableció contratos de compra con un vivero en Quillacollo.



PRODUCTOS

• La Tienda del Cactus ofrece muchas posibilidades para elegir, aunque los productos más requeridos por los clientes son los centros de mesa y los arreglos para colgar en la pared.

• También les piden las macetitas con los cactus enanos para dar de regalo en matrimonios, cumpleaños, bautizos, promociones y hasta baby showers.

• Un terrario mediano con su conjunto de cactus, sus piedritas de colores y sus luces puede costar unos 250 bolivianos.

• Las macetitas enanas cuestan a 10 bolivianos la unidad.

• Entre ambos precios fluctúan los demás productos.

• Para consultas y pedidos, están los teléfonos 70722358 y 70762882. La tienda está en la Pacciri y 16 de Julio.

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