Las vicisitudes, más allá de ser un problema, fueron una motivación para Saravia, quien desafió al destino. Tras la acertada frase de Ana, su esposa, decidió emprender el viaje hacia el éxito. "Por algo será”, le dijo su compañera.
Así, Justiniano invirtió sus ahorros y su liquidación para comprar telas y tijeras, y de esa manera elaborar balones de polar rellenos con fibra terapéutica con los colores de Bolívar y The Strongest. Sería el génesis de Muñetoys.
"Desde pequeña me gustaba armar cosas, hacía vestidos para mis muñecas, y a partir de eso, también decidimos hacer todo”, cuenta Ana Elisa Martínez, la esposa de Justiniano, de profesión enfermera.
A la caza de mercados
Cuando llegó la hora de buscar mercados, Saravia encaró el desafío. Inquieto desde su juventud, se trasladó a distintos lugares para conseguir espacios donde se comercialicen los juguetes, trazándose metas en corto plazo.
Las innovaciones que presenta Muñetoys se ven reflejadas en lo que les gusta a los jóvenes; es decir, se adaptan a las tendencias juveniles, como lo marcan en la elaboración de almohadones de emoticones de WhatsApp, la cara redonda amarilla cuyos ojos son dos corazones; el guiño o el pícaro emoji con anteojos de sol.
"Nuestros hijos son jóvenes, y son ellos quienes nos dicen qué podemos hacer, de ahí surge el tema de los muñequitos del WhatsApp”, manifiesta Martínez.
Asimismo, llaveros con el logo de Facebook o personajes de películas animadas como los Minions o del popular juego Minecraft, son algunos de los diseños que elabora la pareja.
"Hacemos los trabajos a pedido, y éstos son los más requeridos por nuestros clientes”, afirma Saravia, quien posa orgulloso con un Minion vestido de Obi Wan Kenobi, el juguete más solicitado de Muñetoys.
Elaboración
Más allá de los diseños, el trabajo que realiza la pareja es totalmente artesanal. Lejos están de diseñar sus productos en una computadora. "Primero lo estudiamos y luego hacemos patrones en cartón, moldeamos y todo lo que utilizamos lo reciclamos”, argumentan.
Terminar un muñeco manualmente, les demora unos 60 minutos y, claro, dibujar, moldearlo en cartón, cortar la tela y rellenar el producto, no es tarea sencilla. "Muchos creen que es fácil, y no es así, por el mismo hecho que se trata de un trabajo manual”, indica Ana.
Además, los productos sólo son realizados por la pareja. "Somos dos. A veces, nuestros hijos nos ayudan. No creen que somos dos los que hicimos esto. Siempre trabajamos los dos y no pueden creer que tantos productos hayan sido hechos por dos personas. No es suerte, son noches de insomnio, seguir trabajando”, indica Saravia.
Premio
Ese sacrificio tuvo su recompensa y fueron premiados por el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz en el concurso Cultura Emprendedora, como mejor emprendimiento en manufactura.
"No fue suerte, comiendo sin comer, fue trabajoso, fue un premio al esfuerzo, Dios vio lo que sufrimos y recompensó nuestro trabajo”, enfatiza la pareja.
Los objetivos de Saravia van más allá del occidente, y su idea es poder llegar al mercado de Santa Cruz, el cual prevalece a nivel nacional.
Asimismo, esta pareja tiene la idea a mediano plazo de exportar sus productos al exterior, y ven a Chile como un mercado factible, ya que hace poco la hermana de Saravia llevó productos al país trasandino y tuvo mucho éxito comercial.
Y así fue, una idea que creció, triunfó y ahora pretende crecer y generar fuentes de empleo para quienes lo necesiten. La cara de la feliz pareja emula a un emoticón que sonríe y expresa felicidad.
Firma familiar
Una idea Un emprendedor, junto a su esposa, invirtió su finiquito en una idea que hoy es una firma que fabrica muñecos artesanales.
Todo artesanal El trabajo que realizan es manual. Explican que terminar un muñeco les demora 60 minutos.
Logos y pelis Además de llaveros con el logo de Facebook, esta firma también elabora muñecos de personajes de películas como los Minions o del popular juego Minecraft.
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