La caracterización de estos protagonistas está marcada tanto por el comercio de disfraces en tiendas especializadas como en la calle Illampu y el uso de técnicas de maquillaje en salones de belleza como el de Marcelo Ruiz.
DISFRACES
En estos días, la calle Illampu se llenó de compradores, que buscaban alternativas y novedades para las noches de brujas.
Este año no hay muchas novedades, sobre todo porque desde hace un par de años, con la serie The Walking Dead, y lo que más se busca es de zombis.
Para los más pequeñitos la demanda es de superhéroes y brujitas pues afirman que los padres no quieren cosas sangrientas para sus niños, aunque no faltan los fanáticos que buscan accesorios para disfrazas a sus niños de muñecos diabólicos es el caso de Tatiana, quien busca dos pelucas una rubia y la otra pelirroja,
"Disfrazaré a mis niños de Chuky y su novia Jennifer, sé que ya se mostró antes, pero me gustó y quiero que mis hijos vayan así a pedir golosinas", explicó una de las compradoras.
Así como los disfraces, las máscaras para acompañar los trajes son infaltables y la oferta está entre 30 y 90 bolivianos dependiendo del diseño.
La Tienda Gótica Bolivia, en la avenida Ecuador #2205 entre Rosendo Gutiérrez y Fernando Guachalla, ofrece disfraces poco convencionales, enmarcados en el estilo y cultura gótica, como por ejemplo el disfraz de la Caperucita Roja, también hay piratas, brujas y vampiros góticos. Dirigido a público adulto estos disfraces tienen un costo que está entre Bs 200 y 400.
Maquillaje, un elemento indispensable para una noche terrorífica. Algunas personas en vez de elegir un disfraz para Halloween prefieren utilizar maquillaje, para lo cual asisten al Salón de Belleza de Marcelo Ruiz, quien para este época, pone a disposición de sus visitantes paquetes de caracterización que van desde 100 para niños y 150 para adultos.
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