Disfraces con sello y creatividad local

Mucha dosis de ingenio, harto de habilidad y ante todo humor a raudales son imprescindibles para concebir un disfraz carnavalero de impacto, uno de esos que deje con la boca abierta y la risa a flor de piel apenas aparece.

Hace 30 años los miembros más pícaros de las comparsas se encanrgaban de plasmar sus travesuras en atuendos carnavaleros, evocando temas diversos a manera de denuncia social o simplemente para divertir al resto y pasar gratos momentos.

Entonces, los más joviales -denominados “fiestacuetillos”- se las agenciaban buscando ropa, prestándose pelucas y pidiendo ayuda a quien maquillara exageradamente. Lo demás era cuestión de actitud.

Un ejemplo de ello es Oky Chiarella “de Montaño”, ex tenista y recordado personaje cochabambino que desde hace décadas sobresale con sus ocurrentes vestuarios, robando carcajadas, piropos y aplausos del público en los corsos y fiestas privadas.

Sus disfraces como el de Lidia Gueiler, Sancho Panza y el Quijote, la monja, Remedios Loza, Cruela de Vil, la niñera del coche o Blanca Nieves con sus siete enanitos, entre otros, hicieron historia captando portadas de varios diarios y obteniendo galardones.

“Siempre me gustó el carnaval y disfrazarme, aunque a menudo haciéndome reñir con mi Maguicita” (su esposa), confiesa y anuncia además que tiene todo listo para este año.

Otro particular enamorado del carnaval qhochala fue Mario “Koreano” Sánchez de Lozada, hermano del ex presidente, quien a pesar a radicar en Estados Unidos llegaba a menudo en estas fechas festivas ataviado de ideas y “trapos” para competir con su disfraz. “Hacía las delicias de sus amigos con sus bromas y atuendos”, recuerda con nostalgia uno de sus amigos de la fraternidad Jets. Hoy el tema de los disfraces artesanales o caseros cambió por completo y se ha especializado como sector en el mercado Calatayud.

Subsiste compitiendo con mercadería que llega de China, mientras las fiestas religiosas y folcklóricas, junto a actividades de colegios aún requieren diseños y confección de disfraces típicos y elaborados artesanalmente.

De tres personas que iniciaron el rubro de los disfraces hace tres décadas -entre ellas Alcira López- hoy hay 106 en el sector, señala Esmeralda Gamboa López, quien creció con el negocio ayudando a su madre.

Actualmente, Esmeralda es dueña de la tienda más grande de trajes de la ciudad. Alquila y costura a pedido, ofreciendo indumentaria y accesorios por temas, colores y tallas. Su fama llegó a otras ciudades desde donde, según cuenta, le envían diseños que ella elabora y despacha.



3 puestos

iniciaron el negocio de disfraces Hoy 106 personas se dedican al rubro.



15 a 30

Bs cobran por alquilar un traje, además de dejar garantía.



de 3 a 9

años de prisión para infractores que usen pieles o plumas de animales



CREATIVIDAD A RAUDALES

OKY CHIARELLA, PREMIADO VARIOS AÑOS POR SUS DISFRACES

El un declarado amante del carnaval y disfruta de las travesuras y los gratos momentos con su familia y amigos. Chiarella dice que jamás dejó de disfrazarse en carnavales, excepto una época que vivió en EEUU. Su picardía y disfraces son recordados por muchos pobladores. Tal es el caso de la monja, Lidia Gayler, Cruela de Vil, Cervantes & Sancho Panza, Miss Bolivia, entre otros.



ESMERALDA GAMBOA, UNA REFERENCIA AL ALQUILAR Y CONFECCIONAR DISFRACES

Con más de 25 años en el rubro de los disfraces, Esmeralda acompaña desde los siete a su madre en esta actividad, en el mercado Calatayud. Su carisma y habilidades la han convertido en la proveedora por excelencia de disfraces, tanto para colegios, delegaciones e incluso para vestir a los militares del CITE, Séptima División y Tolata. Los clientes llegan con una idea y ella lo hace realidad.



KOKO BURGOA, DISEÑADOR. FUNDADOR DE ENKARTE, ARTEFACTOS DE CARTÓN PARA FIESTAS

Conocido en el medio de gráficos por su talento como dibujante, Burgoa es un férreo ecologista que ha diseñado y creado una línea de mobiliario ultraresistente a base de cartones reciclados.

En 2011 creó un robot para la Séptima División que ganó los aplausos y premios de la gestión por sus premisas de innovación, perfección, reciclaje y responsabilidad social.



LUIS FERNANDO RIVERA, EXPERTO EN MÁSCARAS DE DIVERSOS MATERIALES

Luis Fernanado Rivera fabrica máscaras artesanales con moldes, fibra de vidrio y cemento dental.

Tal vez la más llamativa de sus máscaras es la del rostro del presidente Evo Morales. La pieza tiene un costo de Bs 800.

Rivera diseña y hace los moldes. Asimismo pinta, pule y reviste el interior de las máscaras para darles un acabado fino.