"Papito, te amo; gracias por estar conmigo”, dijo con vocecita insegura al micrófono Keyla, una niña que estudia en la escuela República Argentina, y corrió al lado de su papá para abrazarlo fuertemente. Y fueron los abrazos los que sobraron ayer, Día del Padre, en los colegios paceños.
Keyla, que cursa el sexto de primaria, contó que su papá no asistió varios años a los agasajos del Día del Padre porque su trabajo no se lo permitía; pero ayer él llegó al colegio usando su mejor traje. Minutos antes, en el patio del establecimiento, niñas con atuendos de morenada invitaron a bailar a sus papás que aceptaron orgullosos.
Las madres de familia y los maestros de la escuela República Argentina realizaron el festejo a los padres. "Es un reconocimiento por el rol que cumplen”, contó el director del establecimiento, Carlos Cabrera.
La hora cívica, que fue dirigida por una mamá, incluyó diferentes actividades que invitaron a la participación de los agasajados. Luego, los pequeños compartieron salteñas o pizzas con sus papás en sus cursos.
"Me siento feliz viendo crecer a mi hija Joceline. Veo cómo cada día necesita de mi apoyo, y yo, dispuesto a ayudarla”, afirmó entusiasmado Ricardo Pérez, mientras comía una salteña. El teniente Franz Aliaga miró a su hija emocionado, tras el abrazo que recibió. "Es lo que más quiero. Me saqué tiempo para venir con ella. A veces el trabajo no me lo permite, pero esta vez pude. Tengo que aprovechar”, dijo.
En la Unidad Educativa La Paz, la profesora Mabel Vásquez, asesora del sexto de secundaria C, dio ayer la bienvenida a los padres para agasajarlos de una forma peculiar. "Señores papás, gracias por venir”, dijo a los primeros progenitores, los más puntuales en la recepción.
Cuando llegó la mayoría de los invitados al curso, las estudiantes y la maestra realizaron un concurso de tres juegos: derribar latas con tres pelotas, lanzar el dardo y competir en pulsetas.
"Este tipo de agasajo no es común. Nosotras queremos que nuestros padres no sólo vengan a servirse un plato o una salteña, sino también a que compartan entre ellos, que jueguen y se diviertan. Queremos que se desestresen”, indicó la presidenta del curso, Mayra Quispe.
"Uno, dos, tres... ¡Lance la pelota!”, gritaba la maestra, mientras don Heriberto Tarqui vencía a su timidez y se paraba para ser el próximo en lanzar las bolas para derribar las latas.
Después de ese juego, los padres pasaron a lanzar los dardos. "Por cien puntos para sus hijas”, decía la maestra en son de broma. "Quien reviente un globo, contestará una pregunta. Si su respuesta correcta, gana”, retaba a los progenitores
El primero en reventar un globo fue Wilson Chuquimia, quien acertó a la pregunta: ¿cuántos lados tiene un cubo? "Seis”, respondió con seguridad, y todos lo aplaudieron y le hicieron barra.
Algunas preguntas fueron más complicadas. Cuando a otro padre le consultaron sobre la fecha, día y hora del nacimiento de su hija, se equivocó. Todos lo silbaron y rompieron a carcajadas cuando él justificó: "Soy buen papá, pero tengo mala memoria”.
"Papito, te quiero porque olvidas tu cansancio para estar aquí”, dijo una de las estudiantes ante su emocionado papá que sólo atino abrazarla. Ayer sobraron los abrazos.
Selfies y mensajes para papá desde el PumaKatari
Leny Chuquimia / La Paz
Ocho paneles fueron instalados por la familia del PumaKatari para que la ciudadanía deje en ellos mensajes para papá. Los recados serán colocados en las redes sociales para que sean compartidos hasta que lleguen a sus destinatarios. Los selfies no faltaron.
"Como Servicio de Transporte Municipal hemos querido rendir un homenaje a la persona que todos los días nos enseña a respetar, amar y ver las cosas de una manera distinta. Esa persona es nuestro padre, y queremos que nuestros usuarios puedan expresar lo mucho que lo quieren y lo respetan”, dijo el gerente de La Paz Bus, Marco Fuentes.
Frente a los paneles instalados en la parada de la plaza Camacho, niños, adolescentes, jóvenes y adultos esperaban su turno para hacer público su mensaje. Con ayuda de la tecnología, muchos se tomaban selfies para enviarlos de inmediato con un "Felicidades” a su papás y a las mamás que cumplen doble rol.
"Es una actividad muy interesante porque podemos valorar a nuestros papás y mostrarlo ante el mundo entero en un día tan especial”, dijo Eliazar García.
Con mucho cariño, Eliazar dejó un mensaje en el panel blanco para que su padre lo lea desde donde se encuentre. "Él está en el cielo y sé que desde allí lo va a leer, no sólo en el panel, sino en mi corazón. No es necesario escribirlo, pero es muy bonito plasmar todo lo que lo extraño”.
Patricia Zabala, quien tiene a su padre lejos, tomó entusiasmada una fotografía para enviarla por medio de un mensaje.
En menos de una hora varias de las fotos ya se encontraban circulando por las redes sociales en busca de sus destinatarios. Los ocho paneles, completamente llenos, fueron registrados y publicados en el Facebook de La Paz Bus.
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