El nuevo modelo, perteneciente a la serie de cámaras digitales EOS, permitirá a los usuarios menos experimentados capturar imágenes de alta calidad con mayor facilidad, sin los inconvenientes de cargar con un formato réflex más pesado y complejo de manejar, al contar con un sistema de lentes intercambiables.
Además, la EOS M, de unos 298 gramos, contará con un procesador de imagen DIGIC 5, comparable al que utilizan las cámaras réflex digitales y que permite el máximo estándar de sensibilidad ISO12800, con la posibilidad de ampliarse a ISO25600, para capturar imágenes incluso en entornos de poca luz.
La nueva EOS M permite velocidades de obturación más rápidas y un mayor control del temblor y el desenfoque que mejora las instantáneas en movimiento, y emplea un sensor Hybrid AF, que ofrece un rendimiento más suave en el enfoque para hacerlo rápido y preciso, detalló Canon en un comunicado.
En la opción de vídeo, la función Movie Servo AF realiza un enfoque continuado incluso con movimiento, gracias a un sistema que evita los reflejos y al desarrollo de una montura de lentes significativamente más pequeña con respecto al resto de cámaras.
En algunas tiendas japonesas la cámara ya se puede reservar por un precio que va desde los 62.000 yenes (unos 655 euros o 800 dólares) del modelo sin objetivo, a los 98.000 yenes (algo más de 1.000 euros o 1.215 dólares) del kit con objetivo, y en tres colores: blanco, negro, rojo y plateado.
En términos de volumen de ventas en Japón, las cámaras digitales compactas se encuentran por delante de la tecnología digital réflex de lente única y las "sin espejo" con lentes intercambiables, un formato que ha experimentado un importante avance en el mercado, según el diario económico Nikkei.
En este sentido, según Canon, en 2011 se han vendido en todo el mundo unas 16 millones de cámaras réflex y sin espejo, un 23 por ciento más que en 2010, mientras que en 2012 espera un incremento del 25 por ciento interanual hasta las 20 millones de unidades.
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