La compañía desarrolladora LucasArts tras una meditada decisión de la factoría Disney. En octubre del año pasado, Disney adquirió los derechos de Lucasfilm por 4.050 millones de dólares, e incluía los derechos sobre la gestión del estudio LucasArts, encargado de crear videojuegos basados en algunas de las franquicias más conocidas del director George Lucas como La Guerra de Las Galaxias o Indiana Jones. Desde hace 30 años, LucasArts ha lanzado al mercado títulos relacionados con estas franquicias, creando también algunas propias y de gran éxito como la saga Monkey Island.
Esta es una mala noticia para los amantes de los videojuegos, ya que títulos relacionados con La Guerra de Las Galaxias como Star Wars First Assault o Star Wars 1313 serán cancelados en su desarrollo, al menos por el momento, y a la espera de saber si algún estudio decide adquirir los derechos y terminar el trabajo. Tras la compra de Lucasfilm, Disney no sólo anunció el desarrollo de estos juegos, sino una nueva trilogía de películas de Star Wars que estrenará su primera parte en 2015 con Star Wars: Episode 7.
Según el comunicado emitido por Disney, la compañía ha tomado esta decisión después de evaluar su posición en el mercado de los juegos, pasando de un modelo de desarrollo interno a un modelo de licencia. De esta forma, la compañía pretende “minimizar riesgos”. En pocas palabras, Disney ha creído oportuno que les irá mejor cediendo a otras empresas desarrolladoras los derechos de las franquicias más conocidas de LucasArts como Star Wars o Indiana Jones.
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